Cuando está por nacer un niño, existe un ambiente de incertidumbre y de gran felicidad en el entorno familiar, especialmente los padres del infante que está por arribar a este mundo. el
nacimiento de un pequeño trae una alegría enorme, poder tener en tus manos a quien tiene tu misma sangre, alguien a quien mirar a los ojos, a quien hacer cariños y llevar al parque, un sentimiento grandioso.Pero cuando las cosas no se presentan como quisiéramos, cuando estos pequeños nacen con alguna limitación física o alguna discapacidad, donde como padres los apoyamos y en lo posible tratamos de estimularlos para que puedan vivir lo mejor posible, pero
se puede sentir un dolor enorme, de saber las dificultades que estos chicos tienen que enfrentar, apoyarlos y acompañarlos hará su transitar por la vida mucho más fácil.
El protagonista de nuestra historia es un
valiente hombre de 31 años, Valery Spiridónov quien durante muchos años viene padeciendo una extraña enfermedad genética la cual le impide moverse normalmente, solo puede mover sus manos y la cabeza, es una atrofia muscular que lo tiene postrado a una silla de ruedas.Valery ha decidido no continuar en ese estado y está convencido que un trasplante de cabeza será el remedio a su problema
, un tratamiento poco convencional y sería el primero en el mundo entero, algo que no le asusta, sino lo anima más bien a seguir en busca de una mejor manera de vivir.
El osado neurocirujano italiano el Dr. Sergio Canavero, es quien tiene a su cargo esta gran responsabilidad, cree que a finales del año 2017 se pueda llevar a cabo esta impactante operación. Al parecer China será el país pionero en tomar la bandera en esta clase de operación y ya las autoridades han dado su permiso, algo necesario para seguir agendando lo que sería el comienzo de una vida para Valery.
Los ratones han logrado superar gran cantidad de experimentos similares al procedimiento que prontamente se le realizará a nuestro protagonista, bajo las prodigiosas manos del médico chino Ren Xiaoping, por lo cual la confianza de Valery con relación a su trasplante de cabeza, se reafirma con más fuerza.
La sustancia polietilenglicol según el neurocirujano Canavero, es capaz de conectar las fibras nerviosas de la médula espinal con la cabeza para que el cerebro pueda trabajar normalmente, una operación que durará aproximadamente 36 horas y que contará con gran cantidad de médicos dispuestos a apoyar en esta difícil tarea.
La historia de Valery puede empezar a escribirse de otra manera, dependiendo de los resultados de este novedoso trasplante.
