Una boda es algo con lo que muchos novios sueñan, pues esta es una ceremonia bastante sagrada así como formal en donde se confirma el amor que se tiene una pareja, llegándose a consolidar de esa manera una bella unión que debería hacerlos permanecer juntos hasta los últimos días de sus vidas.Como puedes ver, un matrimonio ya de por sí es algo sumamente especial, ahora imagínate recibir una sorpresa increíble y totalmente inesperada en medio de la ceremonia, la conmoción que causa definitivamente es inevitable, esta es la historia de esta pareja de esposos, en donde el joven Ollie, decidió sorprender al amor de su vida con algo increíble.Liz era una bailarina profesional así como maestra de baile en una escuela, además, era la feliz esposa que había aceptado contraer matrimonio con Ollie, aunque nunca se imaginó la sorpresa que le tendría preparada su amado para ese día tan esperado.Ollie sabía el apreció que Liz tenía por sus alumnos, por lo cual decidió contactarlos junto a los padres de ellos para invitarlos al matrimonio, aunque los alumnos no asistirían sólo como espectadores, trabajó arduamente con ellos para preparar sin que Liz lo supiera un número musical para lograr sorprender a su amada en aquél día que sería tan especial.Llegó el día tan esperado para la pareja de novios, se encontraban frente al altar diciéndose sus votos en presencia de los invitados, seguido a esto, Ollie le pidió a Liz que se volteara un instante y diera un vistazo al palco de la iglesia, la sorpresa que se llevó Liz al ver a sus alumnos interpretar el número musical que habían preparado la hizo romper en llanto de la emoción.Lo que conmovió a Liz en lo más profundo es que ésta no se trataba de una canción cualquiera, el número musical que estaban interpretando sus alumnos era su canción favorita, y al ver que estos habían preparado este bello gesto junto a su esposo para el día de su boda, Liz no pudo contener más las lágrimas de felicidad.

Definitivamente este fue un gesto sumamente hermoso por parte de Ollie así como por parte de sus alumnos, ellos al ver la cara de felicidad y de emoción que tenía Liz, supieron que valió totalmente la pena todo el trabajo y el esfuerzo que dedicaron durante meses. Definitivamente esta es una hermosa historia que tiene un fantástico final feliz.