La vida es un tesoro y debemos apreciarla, no solo para nosotros los humanos también para los animales. Afortunadamente últimamente se ha evidenciado
el amor tan grande que tenemos por nuestras mascotas y el esmero en cuidarlas. Indudablemente estos animalitos llegan a formar parte de nuestra familia y se instalan en nuestros corazones.
¿Pero qué pasa con los animales callejeros o los que se encuentran en libertad? Muchos viven a sus anchas en su hábitat natural y solo deben cuidarse de sus depredadores, algo natural dentro de la cadena alimenticia. Donde el más fuerte ataca al más débil y así sucesivamente, pero dentro del mundo animal es lo cotidiano y ellos mismos resuelven sus conflictos.
Lamentablemente el hombre ha metido su mano en todo y los animales no se escapan del
desenfreno desmedido de muchos humanos por quererse hacer millonarios a costa de la estos seres vivos, comercializan con ellos como si se trataran de objetos, sin importar a quien o donde van ofertando al mejor postor, todo con la finalidad de llenar sus bolsillos. Una triste y cruel realidad.
Valores y principios que bien demuestran los dueños y personal del
zoológico de Indonesia, muy bien llamado el
zoológico de la muerte, donde maltratan y se lucran a costa de nuestra fauna.
Allí al parecer lo único que hacen explotar a unos animales que llegan a caer en sus manos y sufren lo peor, un trato que nadie merece.
Este zoológico es uno de los sitios más visitados por los turistas y el atractivo principal son los animales que se encuentran en el lugar. Donde son obligados a ofrecer espectáculos, los colocan en sitios estratégicos donde las personas los puedan observar y son utilizados para atraer muchos más clientes, lo que se traduce en ganancias económicas para el zoológico.
Es evidente la falta de higiene, de alimentación y de condiciones apropiadas para cada especie animal. No existen cuidados médicos veterinarios que vigilen el buen desarrollo, mantenimiento y evolución de los animales. Todos están a su suerte y morirse de hambre, enfermedad o vejez allí es la consigna.
Desde el año 1916 en que se apertura este zoológico según una investigación hecha por
East Java Natural Resources Conservation Agency pudieron constatar que han muerto muchos animales y solo entre el 2008 y 2009 cerca de 690 animales, cifras verdaderamente aterradoras y lamentables.
Se ha dirigido una petición a
charge.org con la intención de cerrar este zoológico, reuniendo hasta la fecha 507.823 firmas.
La idea es parar esta crueldad y que los culpables paguen por ello.
No es justo que los animales tengan que padecer y sufrir tanto,
ya es hora de frenar este comportamiento vulgar y criminal de algunas personas que solo piensan en sus propios intereses arrasando con nuestra fauna inclementemente.
