A pesar de encontrarnos en pleno siglo XXI, en la actualidad existen personas que lamentablemente aún apoyan ideas a favor del racismo así como de distintos prejuicios hacia los demás.Rachel y su esposo Aaron vivieron en carne propia el rechazo por parte de la discriminación y los prejuicios, a pesar de esto, esta maravillosa pareja nunca dejó que esto los afectara y siempre siguieron adelante, llegando a hacer algo bastante emotivo, esta es su historia.Esta pareja siempre había deseado tener hijos aunque hasta el momento no lo habían conseguido, por lo cual decidieron adoptar a 2 niños afroamericanos. Esta decisión los convirtió en víctimas del odio por parte de algunas personas que los conocían, debido a que muchos no aceptaban el hecho de que una pareja blanca adoptara a niños afroamericanos.A pesar del rechazo que sufrieron Aaron y Rachel, estos siempre se mantuvieron firmes con su decisión, pues se sentían bastante felices por el hecho de brindarles un hogar a estos pequeños niños que no tenían familia y además estos pequeños también les estaban permitiendo cumplir el sueño que ellos tenían de ser padres.Muchos de los que conocían a Aaron y Rachel se sorprendieron aún más cuando se enteraron de lo que ahora esta pareja planeaba hacer. Esta pareja quería darle unos hermanitos a sus dos pequeños hijos y fue por esto que decidieron intentar algunas alternativas para que Rachel pudiera vivir el embarazo y así hacer que la familia creciera un poco más.Fue entonces que la pareja decidió optar por un método conocido como la adopción de embriones, que básicamente consistía en implantar embriones en Rachel para que esta pudiese quedar embarazada.Rachel contando con el apoyo de su esposo decidió implantarse 2 embriones afroamericanos que habían estado congelados durante unos 15 años, entre las razones que motivó a la pareja a elegir estos embriones, Aaron y Rachel manifestaron que era por el hecho de que querían que sus hijos tuvieran dos hermanitos como ellos, de lo cual se sentían bastante orgullosos.Para la sorpresa de la pareja, uno de los dos embriones implantados en Rachel se había dividido en dos, lo cual quería decir, que ahora el embarazo no era de gemelos, sino de trillizos. El parto resultó ser todo un éxito y fue así como Aaron y Rachel se convirtieron felizmente en padres de 5 hermosos niños.Esta historia nos demuestra que el amor es un sentimiento realmente profundo que va mucho más allá de los rasgos físicos o el color de piel.