Una leyenda, una historia o quizás un tesoro es lo que es hoy en día el Titanic. Por eso Robert Ballard luego de una intensa búsqueda y logrando el éxito en esta tarea, este hombre pudo encontrar en lo  más profundo del océano este barco que para muchos ya se daba por perdido, la misma que muchos investigadores habían intentado obteniendo respuesta fallida.No era una aventura más para Ballard, esta era una verdadera travesía fascinante que emprendió con la más firme decisión de hallar el Titanic, el barco pieza clave en aquel evento trágico.Las siguientes imágenes ilustran la hazaña que junto a su equipo este hombre pudo lograr:  Un pequeño vehículo con una cámara fue necesario para acceder a algunos lugares, una transmisión realizada desde los 3.800 metros bajo la superficie, todo para captar al protagonista de tantas historia.El compromiso de Ballard fue rastrear los submarinos que la Marina buscaba, dejando un tiempo extra para buscar el Titanic, un pacto que los dos acordaron para esta faena.Junto a un grupo de investigadores este hombre se asoció con la finalidad de detectar el tan anhelado tesoro en la región que se suponía debía estar.Esta experiencia le enseñó una nueva técnica y es que entendió que las corrientes oceánicas movilizaban restos pequeños de submarinos, los mismos servían como guía para lograr su objetivo.Un avance en tan difícil tarea era digna de celebrar por este grupo de hombres.El interior simplemente espectacular y de ello da fe estas espectaculares fotos.Al regresar al lugar estas fotografías quedaron como testimonio de aquel evento.El mar se encarga de cuidar algunas partes de este barco.Un cementerio donde el silencio retumba.
el tiempo lo dirá y aunque es una aventura enriquecedora, es prudente considerar que allí se apagaron muchas vidas las cuales merecen ser respetadas y recordadas.